Si parece una locura es porque lo es. Con ustedes, un plan para mantener los transbordadores espaciales volando hasta 2017. Según esta propuesta, el Endeavour y el Atlantis se encargarían de realizar dos misiones al año bajo control total de la empresa USA (United Space Alliance), actualmente subcontratista principal de la NASA para la gestión de las operaciones del transbordador.
Así, a partir del año que viene, USA podría vender a la NASA los servicios del shuttle como vehículo comercial del mismo modo que, por ejemplo, SpaceX oferta la nave Dragon. El inconveniente más grave al que se enfrenta esta propuesta es la necesidad de reconstruir la infraestructura para fabricar los SRB de cuatro segmentos y el Tanque Externo, actualmente clausurada o en proceso de transformación hacia el difunto Programa Constelación. Por supuesto, estas instalaciones podrían volver a funcionar con la debida inyección de dinero fresco, pero el presupuesto de la NASA ya se encuentra al límite con el programa del futuro lanzador pesado HLV/SLS. Para mantener al transbordador en servicio, USA estima que debería invertir 1500 millones de dólares al año. O, dicho de otra forma, no hay dinero pa' tanto proyecto.
En todo caso, hay algo que nadie entiende. Hasta hace unos meses se repetía de forma insistente que era imposible mantener a los transbordadores volando más allá de 2011. Y ahora, justo cuando el shuttle está a punto de jubilarse, aparece esta propuesta, ¿se ha vuelto el mundo completamente loco? ¿Estamos ante una maniobra de USA para mantener el statu quo? Una cosa es evidente: nunca la NASA había estado tan perdida.
Hasta el momento no está claro el grado de apoyo político del que goza esta propuesta, aunque es de esperar que no sea muy alto. De seguir adelante, este plan daría un giro inesperado a la política espacial de la NASA (y van...) y supondría un serio obstáculo para desarrollar el HLV y la Orión. Por otro lado, no se solucionaría el problema del acceso a la órbita baja por parte de la NASA, sólo se trasladaría a 2017. El único atractivo para la clase política es que, de esta forma, los EEUU mantendrían la capacidad para viajar al espacio hasta que se desarrolle una nave espacial privada (Dragon, Dream Chaser, etc.). Lo que no está muy claro es que los políticos estén dispuestos a aceptar el riesgo de perder otro transbordador y su tripulación. ¿Sacrificarán los Estados Unidos el desarrollo del HLV por mantener el acceso al espacio a corto plazo? En caso afirmativo, esta propuesta sería pan para hoy y hambre para mañana.

El Discovery es trasladado a la rama (NASA).
Así, a partir del año que viene, USA podría vender a la NASA los servicios del shuttle como vehículo comercial del mismo modo que, por ejemplo, SpaceX oferta la nave Dragon. El inconveniente más grave al que se enfrenta esta propuesta es la necesidad de reconstruir la infraestructura para fabricar los SRB de cuatro segmentos y el Tanque Externo, actualmente clausurada o en proceso de transformación hacia el difunto Programa Constelación. Por supuesto, estas instalaciones podrían volver a funcionar con la debida inyección de dinero fresco, pero el presupuesto de la NASA ya se encuentra al límite con el programa del futuro lanzador pesado HLV/SLS. Para mantener al transbordador en servicio, USA estima que debería invertir 1500 millones de dólares al año. O, dicho de otra forma, no hay dinero pa' tanto proyecto.
En todo caso, hay algo que nadie entiende. Hasta hace unos meses se repetía de forma insistente que era imposible mantener a los transbordadores volando más allá de 2011. Y ahora, justo cuando el shuttle está a punto de jubilarse, aparece esta propuesta, ¿se ha vuelto el mundo completamente loco? ¿Estamos ante una maniobra de USA para mantener el statu quo? Una cosa es evidente: nunca la NASA había estado tan perdida.
Hasta el momento no está claro el grado de apoyo político del que goza esta propuesta, aunque es de esperar que no sea muy alto. De seguir adelante, este plan daría un giro inesperado a la política espacial de la NASA (y van...) y supondría un serio obstáculo para desarrollar el HLV y la Orión. Por otro lado, no se solucionaría el problema del acceso a la órbita baja por parte de la NASA, sólo se trasladaría a 2017. El único atractivo para la clase política es que, de esta forma, los EEUU mantendrían la capacidad para viajar al espacio hasta que se desarrolle una nave espacial privada (Dragon, Dream Chaser, etc.). Lo que no está muy claro es que los políticos estén dispuestos a aceptar el riesgo de perder otro transbordador y su tripulación. ¿Sacrificarán los Estados Unidos el desarrollo del HLV por mantener el acceso al espacio a corto plazo? En caso afirmativo, esta propuesta sería pan para hoy y hambre para mañana.

El Discovery es trasladado a la rama (NASA).
Poco puedo añadir ya a lo dicho. ¡Qué disparate! Sería mejor gastar el dinero en vuelos con las Soyuz que estar resucitando a un zombi e hipotecando el futuro del transporte espacial norteamericano.
ResponderEliminarEl montaje de la ISS está tocando a su fin, y por lo tanto no se justifica el uso del transbordador mas allá de las última misiones programadas.
A mí esta propuesta me parece lógica; si yo fuera estadounidense preferiría eso a quedarme sin nada y dependiendo de Rusia unos años. Sí, es más caro y retrasaría otros programas, pero el prestigio y el orgullo nacional también tienen su peso. Sería algo testimonial, para decir "nosotros seguimos teniendo capacidad de mandar gente al espacio".
ResponderEliminarTal vez lo más triste de todo esto es lo que dice Daniel, que "la NASA nunca había estado tan perdida". Parece que van dando palos de ciego aquí y allá sin mucho sentido; y eso no es nada bueno para la exploración espacial en general.
Un saludo.
Espero que sólo sea una broma pesada ebria de verbena por parte de la NASA porque no creo que su futuro programa tripulado aguante muchos más achaques.
ResponderEliminarNo se cual es la fuente, pero parece una de tantas propuestas sin sentido de la NASA.
ResponderEliminarA esta agencia nadie la entiende.
Ni loco, ya son muy viejos y son muy vulnerables (deposito de combustible lateral etc..)
ResponderEliminarOtro accidente y cierran el quisoco. Mas vale que esperen un poco y desarrollen uno nuevo y mas seguro.
ya que no puedo ser el Venture Star o el X-33, por lo menos no vallamos a peor
OT: http://en.wikipedia.org/wiki/KOI_701.03
ResponderEliminar¡...Mas madera...!
ResponderEliminar¡...Mas madera, muchachos...!
Si Groucho Marx levantase la cabeza... Sería un zombi. ;-)
Al tema: está claro que si ponen esa oferta sobre la mesa, y trasciende a la luz pública, es que ya existen maniobras bastante avanzadas bajo la mesa, y en los despachos.
Esperemos que por el bien de la astronáutica, no llegue a concretarse.
Están locos estos de la NASA...
Y yo digo: por que no han seguido con el programa del transbordador a ese precio ??? o es que antes habia gente llenandose los bolsillos o ahora racanean con esta propuesta la seguridad de una nave (menor costo=menos personal= + riesgo).
ResponderEliminarEn lo que coincido es que la nasa no sabe a donde va y lo peor es que los politicos tampoco y estan enredando y el presupuesto sin aprobar.
Que pena me dan. Si yo pudiera ir allí y hablase ingles les diria a gritos: PERO SE PUEDE SABER A QUE JUEGAN ¡¡¡¡¡ y a continuacion ir la congreso y decirles: CIERREN EL PROGRAMA TRIPULADO DE UNA VEZ Y SE ACABO EL PROBLEMA, PERO NO ENREDEN MÁS.
Con la cantidad de estudios echos por la nasa en cohetes podrian empapelar y empaquetar la catedral de León.
jorge m.g.
Yo creo que es un último intento de los contratistas de mantener la gallina de los huevos de oro(para su beneficio, claro). Un transbordador a 1,5 billones de dólares por unidad no puede ser rentable para nada, la NASA tiene que ahorrarse ese dinero e invertirlo en otro proyecto de lanzador tripulado(cohete+cápsula) más barato.
ResponderEliminarEl panorama espacial norteamericano cada día empeora más sin embargo, de todas las propuestas que se han hecho esta es la que a mi parecer tendría más sentido en medio de tanto desorden desde que cancelaron Constellation:
ResponderEliminar1. Teoricamente cada orbitador estaba diseñado para volar 100 misiones... los estaban retirando con menos de la cuarta parte de dichos vuelos; de no haberse producido el accidente del Columbia, aunque ya se hablaba de retiro de los orbitadores, no hubiera sido ni por mucho tan repentino como con el plan actual y se parecería más a ese horizonte del 2017 del que se habla ahora.
2. La razón de ser original del transbordador espacial era darle servicio a estaciones espaciales, cuando por fin está cumpliendo dicha misión completamente se le retira. Hay muchísimas cosas que ni una Soyuz ni una cápsula llámese como se llame pueden hacer que el transbordador si...desorbitar un módulo completo de la ISS por ejemplo, sin ser experto se me ocurre que el análisis de una pieza de hardware habitado tan grande con todos sus sistemas ensa,blados y en condiciones de operación expuesto a las condiciones del espacio por largo periodos de tiempo podría arrojar cantidades valiosas de información para diseñar estructuras más robustas al futuro o para diseñar naves habitadas interplanetarias... unas cuantas piezas sueltas no aportarían tanto como un módulo completo que lleve casi una década allá arriba analizado con todo el rigor que solo un laboratorio en la Tierra podría proporcionar.
3. Se evita la brecha de tiempo que habría entre poner a punto un sistema 100% privado de acceso al espacio y la baja del transbordador... una brecha similar a la que existió en los 70's entre ASTP y STS-1. El golpe psicológico que en el pueblo estadounidense va a significar que solamente esté disponible las Soyuz para los astronautas americanos puede ser un terrible obstáculo para futuros apoyos a nuevas iniciativas espaciales de Estados Unidos.
4. Se evitarían desarrollos sin un objetivo claro... el HLV no tiene un uso definido al día de hoy y por lo mismo es propenso a ser cancelado como el Constellation en cuanto llegue otra administración a la Casa Blanca; el Shuttle hoy por hoy está funcionando: es caro y es inseguro, pero eso es mejor que quedarse en tierra por años o de depender de una potencia extranjera.
5. Volar el transbordador (y cualquier vehículo espacial) ya es especialmente peligroso hoy en dia, aunque irónicamente es infinitamente más seguro que cuando voló el STS-1 o el STS-51L o el STS-107... dos fallas catastróficas han empujado hasta el límite las medidas de seguridad que se tomen para que vuele un transbordador ... ¿que puede volver a fallar?, claro que puede fallar!, al igual que puede fallar el próximo vuelo de Soyuz que no porque no halla fallado catastróficamente desde 1971 no significa que sea perfecto y que jamás va a fallar (el único lanzador tripulado que hasta el día de hoy tiene récord perfecto es el Saturn V y creo que dicha marca la tiene porque fue retirado de servicio muy prematuramente, antes de que su manejo se volviera "de rutina" o que aflorara algún fallo de diseño o construcción que nunca tuvo oportunidad de manifestarse y que jamás conoceremos).
Desafortunadamente la NASA se metió en camisa de once varas desde el mismísmo año 71, cuando se decidió por el diseño y construcción del Shuttle, un auténtico callejón sin salida tecnológico que 40 años despúes está pasandole la carísima factura. Algo que desde aquel momento ya era inviable tal y como se concibió y que solo empeoro al venderle su alma al diablo al pedir apoyo de los militares que al final fueron los primeros que abandonaron el proyecto luego de la desintegración del Challenger.
Hoy más que nunca queda el título de un documental de la DW que vi hace cosa de unos 10 años respecto a la desastrosa gestión de Dan Goldin y que me da escalofríos ver que sigue quedando como anillo al dedo al estar las cosas igual o peor: "Quo vadis NASA??"
@JorgeC: no estoy de acuerdo. El orgullo nacional no vale para tomar estas decisiones. No se puede politizar el programa espacial, EEUU ahora colabora con Rusia, ya no estamos en la guerra fría. Los grandes proyectos se tendrán que desarrollar internacionalmente. Ha sido la única manera de mantener la ISS. La Soyuz es mucho mas barata y versátil que el transbordador, este último se ha vuelto un dolor de cabeza, lo mejor que pueden hacer es borrón y cuenta nueva, usar las soyuz hasta que las privadas terminen. Luego sacar un lanzador pesado y preparar el terreno para los próximos 40 años con cabeza y la colaboración de todas las potencias. No vale para nada mantener colonias independientes en la luna, mucho mejor una gestión comunitaria internacional.
ResponderEliminar¡Que disparate!, lo que es no tener ni idea de que hacer con el dinero. Me es difícil imaginar lo que son MILES de MILLONES de dólares tirados a la basura (mas aún, en el estado económico actual de EE.UU), cuando podrían ir al desarrollo de un HLV y cápsula de espacio profundo que le abrirían las puerta de la futura exploración espacial y al mismo tiempo al desarrollo de una de nave cuerpo sustentador (lease HL-20 y derivados) comercial para LEO que los mantendrían como punta de lanza en el campo. Pero claro, todo sea para mantener los bolsillos de los contratistas llenos manteniendo el statu quo.
ResponderEliminarLo triste es ver lo que consiguen los rusos con una décima parte del presupuesto. Le da un significado completamente nuevo a la palabra "despilfarro".
ResponderEliminar@Jimmy: estoy de acuerdo contigo en mucho de lo que dices. Lo ideal es la colaboración absoluta en materia espacial, se abaratarían muchísimo los costes y se lograrían metas más ambiciosas.
ResponderEliminarPero no nos engañemos, los sentimientos son los que mueven a la gente: el orgullo nacional fue lo que llevó a Kennedy y sus sucesores a poner un hombre en la Luna. Y a los rusos a construir estaciones espaciales para dominar ese campo sobre los americanos.
Es cierto que hoy día hay colaboración, pero una nación como EEUU no se puede permitir depender de Rusia para acceder a su parte de la ISS, es un golpe muy duro a su autoestima. Y ojo que yo no soy nada pro-yankee. Pero repito, si fuera estadounidense, ésta sería mi opción preferida. Simplemente porque es la única que me permite tener continuidad en la capacidad de mandar gente al espacio por mi cuenta.
Un saludo.
Creo que es una metedura de pata. Y muy grave. Esperemos que no, pero ¿que pasará si hay otra perdida de una nave con su tripulación?, vamos, de locos...
ResponderEliminarCreo que el Shuttle es un cadáver que se resiste a morir. Y se resiste a morir porque muchos estadounidenses ven que van a tener que depender de Rusia durante un período de tiempo más que indefinido. Mejor confiar en un cadáver que en un extranjero. Pero lo cierto es que el transbordador es algo inviable hoy dia. Como dice asimovo, ¿Qué pasará si hay otro accidente mortal? No creo que nadie se arriesgue a asumir esa responsabilidad (políticamente hablando). ¿Por qué no se deciden los de la NASA a diseñar una nave tripulada en vez de hacer todos esos proyectos que luego se quedan de posavasos en alguna oficina?
ResponderEliminarComo de dijo un amigo: "éstos, en vez de ir a las estrellas, prefieren estrellarse". Creo que es una frase más que acertada, visto lo visto. Saludos.
Una cosa que no ha dicho Jose Alfredo, pido perdón porque no soy un erudito en el tema. Pero una razón más para mantenerlo es que hacer con toda la gente que se irá a la calle despues de cancelar el programa y la fuga de cerebros a otras agencias que aunque colaboren en la EEI son competencia. Aunque sí que es verdad, es retrasar la situación inevitablemente unos años más gastando una barbaridad de recursos.....
ResponderEliminarSiempre se ha derrochado pero cada día tienen menos margen.
Que conste que estoy a favor de cancelar el programa del transbordador.
Como aficionado a los transbordadores me alegraría enormemente seguir viendo volando a mis queridos Shuttles hasta el 2017.
ResponderEliminarPero desde mi lado racional, creo que ya es hora de que los transbordadores se echen elegantemente a un lado y descansen ya los pobres.
La NASA debería innovar, da igual que en un nuevo transbordador espacial, pero que sea más seguro que el que ya tenemos.
El orgullo nunca a asegurado nada más que lo inevitable, y con el Columbia ya sufrimos bastante.
Aun así, pase lo que pase, lo seguiré mirando con buenos ojos.
Hola,
ResponderEliminarCreo que lo mejor que puede hacer la NASA en estos momentos es desarrollar el HLV (o por lo menos intentarlo) y esperar a que futuros presidentes americanos apuesten por la exploración espacial y aporten más recursos económicos.
Una vez que el HLV esté más o menos desarrollado supongo que será más fácil aprobar nuevas misiones de exploración, incluso nuevos vehículos tripulados (suponiendo que la Orión no se desarrolle). No olvidemos que todo depende de la política, el programa Constellation hubiera sido mucha más económico si ya hubiese existido un lanzador pesado al estilo del HLV. O esa es mi opinión, no se que pensáis vosotros.
Creo que los estados unidos deberían olvidarse del transbordador, que aunque es un gran vehículo ha llegado a su fin.
Iván.